Ando en tinieblas y tropiezo y caigo
y me levanto y piso con pies ciegos
las piedras mudas y las hojas secas
y alguien detrás de mí también las pisa:
si me detengo, se detiene;
si corro, corre. Vuelvo el rostro: nadie.
Todo está oscuro y sin salida,
y doy vueltas en esquinas
que dan siempre a la calle
donde nadie me espera ni me sigue,
donde yo sigo a un hombre que tropieza
y se levanta y dice al verme: nadie.
Poema: Octavio Paz. Fuente: Revista Zenda sección de poesía.
Contacto: cosasquesiento@gmail.com
Twitter: @c_grant1
Facebook: Rita
Contacto: cosasquesiento@gmail.com
Twitter: @c_grant1
Facebook: Rita
Es la calle Vida que recorremos día a día, y Paz de mis favoritos.
ResponderEliminarY de mis favoritos, tambien. Un placer recibirte, Fackel. Abrazos.
Eliminar¿Lo es también para ti?
ResponderEliminarSIIIIIIIII
EliminarQué poemazo... Impresionante!
ResponderEliminarGracias Rita por traérnoslo!
besitos
Impresionante como casi todo lo que escribe Octavio.
ResponderEliminarUn abrazo mi bella.