Ellos ya no hablan, solo miran.
Incluso ricos, son pobres
han perdido sus ilusiones.
Sus voces se agrietan
cuando hablan del ayer
han vivido demasiado,
han reído demasiado,
por eso sus lágrimas
brillan todavía en sus párpados.
Los viejos ya no sueñan,
miles de libros
se llenan de polvo
en las estanterías.
Los viejos ya no se menean
de la cama,
al sillón,
y después de la cama,
la cama.
Y si salen
agarrados del brazo
con mucha ropa
en cualquier estación del año.
Los viejos no mueren
solo duermen mucho tiempo.
Tienen miedo a perderse
pero sin embargo se pierden.
Y el otro se queda
el mejor o el peor,
eso ya no importa
el que se queda pasa un infierno.
No los veras comer,
no los oirás hablar,
solo llorar
y casi no pueden sonreír
porque se mueren por dentro.
4/VIII/1987
Incluso ricos, son pobres
han perdido sus ilusiones.
Sus voces se agrietan
cuando hablan del ayer
han vivido demasiado,
han reído demasiado,
por eso sus lágrimas
brillan todavía en sus párpados.
Los viejos ya no sueñan,
miles de libros
se llenan de polvo
en las estanterías.
Los viejos ya no se menean
de la cama,
al sillón,
y después de la cama,
la cama.
Y si salen
agarrados del brazo
con mucha ropa
en cualquier estación del año.
Los viejos no mueren
solo duermen mucho tiempo.
Tienen miedo a perderse
pero sin embargo se pierden.
Y el otro se queda
el mejor o el peor,
eso ya no importa
el que se queda pasa un infierno.
No los veras comer,
no los oirás hablar,
solo llorar
y casi no pueden sonreír
porque se mueren por dentro.
4/VIII/1987
A Julio y María
Fotografía: álbum personal
Contacto: cosasquesiento@gmail.com
Twitter: @c_grant1
Facebook: Rita
Muy bonito Rita: Como siempre tu abuelo presente. Muy bien, no hay que olvidarlos, tenerlos en el recuerdo conformara mejor nuestras vidas. Un beso . Silvia
ResponderEliminarSiempre presentes, los llevo conmigo.
ResponderEliminarBesos Silvia.
Mucho cariño hay en tus letras. Lo comparto.
ResponderEliminarGracias Mari Luz. Un fuerte abrazo.
EliminarUn detalle precioso para unos seres memorables, mi querida amiga.
ResponderEliminarMil besitos, preciosa.
Unos seres que siguen vivos en mi corazón y memoria.
EliminarMil besos.
Qué triste, Rita. Y, sin embargo, no hay ni una sola falsedad en tu poema.
ResponderEliminarEs la vida, querido amigo.
EliminarUn fuerte abrazo.