dentro de la espiral,
mantener la mano
en contacto constante
con la pared derecha
del laberinto,
abrazar la hiedra y las flores,
seguir avanzando
hasta encontrar la salida.
Volver a la vida.
Poema para "Proyecto Laberinto" del colectivo literario-artístico "El hombre que fue jueves".
Exposición colectiva. Centro Fundación Cajarioja Bankia. Logroño (La Rioja).
Cartel del proyecto: Valle Camacho. 2024.
Contacto: cosasquesiento@gmail.com
Twitter: @c_grant1
Facebook: Rita
Curiosa disquisición (indagación) en la travesía del laberinto. ¿Te has dado cuenta de que se agite uno dentro de él o se quede parado el laberinto nunca proporciona una salida? Asumir el laberinto es lo importante, evitar a los montruos sería lo inteligente.
ResponderEliminarPor cierto, la figura de ese laberinto de la portada del libro toma la representación del laberinto que hay en el suelo de la catedral de Chartres. A mí me impresionó, es fantástico y sobrecogedor, lo hicieron hace siglos para simbolizar la peregrinación a Jerusalén. Una belleza.
Cierto, todo lo que me cuentas, Fackel pero los monstruos no se pueden evitar hay que aprender a vivir con ellos para poder salir de ese laberinto.
EliminarGracias por tu comentario, son siempre maravillosos.
Un abrazo enorme.
Instrucciones para la vida.. instrucciones para la experiencia. Y tu poesía inundándolo todo!
ResponderEliminarPrecioso!
Un beso grande.
Y gracias a esa vida y esa experiencia podemos seguir el camino.
EliminarGracias por tu comentario mi querida Luna, siempre son maravillosos.
Un abrazo enorme.